La Dirección de la empresa, a pesar de haber recibido nuestros comunicados a la plantilla, la citación del SIMA (Servicio de Mediación), y asistido a dicha reunión, alega no haberse dado por enterada de la existencia de la huelga y nos ha comunicado su amenaza de declararla ilegal, aduciendo, además, la existencia de servicios esenciales. Si bien es cierto que, al convocar la huelga a través de la federación estatal de CCOO, no se hizo una notificación formal a la Dirección de la empresa, estaban enterados. Debido a esto, y para evitar posibles consecuencias para los trabajadores, no vemos otra opción que postponer la huelga.
Estamos rehaciendo toda la burocracia y reorganizando las movilizaciones para reconvocar la huelga en los días 30 de septiembre, 1, 2 y 3 de octubre. La elección de los días, tras barajar varias opciones, viene condicionada por el requisito de cumplir el plazo de 10 días desde la convocatoria hasta el inicio de la huelga, y estar así totalmente cubiertos ante la hipotética existencia de servicios esenciales.
Como podéis ver, esto está lleno de trampas y la Dirección utiliza cualquier pequeño subterfugio para escabullirse e intentar coartar el derecho fundamental de protesta de los trabajadores. La Dirección juega muy fuerte, activando todos los mecanismos posibles para evitar los efectos de la huelga, porque ven que se les viene encima una respuesta de los trabajadores que no esperaban en absoluto. Los representantes de los trabajadores seguimos abiertos a llegar a un acuerdo con la Dirección. La semana que viene esperamos mantener una nueva reunión en el SIMA además de la reunión con Ricardo Ramos.
Llamamos a que, hasta que empiece la huelga, no accedáis a realizar horas extra, que os recordamos que son voluntarias, por muchas presiones que podáis recibir para salvar parte del cierre de año fiscal. Con este esfuerzo por vuestra parte y el aplazamiento de la huelga, nos consta que la presión ejercida por los trabajadores será similar a la de la convocatoria original.
Entendemos y lamentamos que esto os pueda perjudicar en la organización que habíais hecho de vuestras vidas.
Debemos mantenernos fuertes y unidos para conseguir los objetivos que se acordaron en la asamblea.
La Dirección debe tener en cuenta el respaldo mayoritario de los trabajadores que se manifestó en las asambleas.
