Una vez más, la dirección de SRA cree que puede “vender” cualquier cosa a los trabajadores a través de charlas “de adoctrinamiento”. Y digo una vez más porque ya vendió antaño que el cambio del centro de trabajo era cojonudo, que, literalmente, no había dinero para subir sueldos con argumentos “financieros” y cosas por el estilo.
La dirección no es tonta y sabe que los trabajadores tienen que recibir su propaganda a través de una figura de autoridad (autoridad en el sentido de que va a decidir tus subidas y promociones). No es extraño que se busque por parte de la dirección una figura de autoridad para “transmitir” opiniones, ya que así esas opiniones se transforman en fuerza coercitiva sobre los trabajadores. La dirección sabe que muchos trabajadores pueden sucumbir a la coerción mediante el engaño de sí mismos para que así sea más fácil escoger el camino que les quita de “lios” a corto plazo.
Dicho de otro modo, el objetivo de la propaganda de la dirección es sobretodo ofrecer una lista de justificaciones para que el trabajador pueda escoger al menos una y utilizarla para convencerse a sí mismo de lo mal que lo están haciendo aquellos que quieren mejorar su salario y derechos, y así evitar un posible conflicto con esa misma figura de autoridad.
En resumen, vamos a tener que pasar otra vez por el lamentable espectáculo de las reuniones que empiezan desde la dirección hacia los mandos intermedios y luego de los mandos intermedios al resto de trabajadores. Si expusieran públicamente sus argumentos, estos podrían ser rebatidos también públicamente. Haciéndolo así, pueden introducir los mensajes que quieran en grupos reducidos donde la figura de autoridad hace que la crítica sea mucho más difícil de ejercerse.