Hoy 23 de febrero, hemos mantenido otra reunión de la mesa negociadora. Tras haber acercado posturas por nuestra parte, en esta ocasión la Dirección tenía que “mover ficha”. Sin embargo, lo que ha pasado, es que no ha habido tal movimiento.
Esto se traduce en que la Empresa no ha variado su propuesta, siendo nulo el incremento en cuanto a las cuestiones económicas. Ante comentarios nuestros como que tanto los beneficios de la Compañía, como la situación económica actual eran propicios para una subida de sueldos y salarios acorde, nos han dicho a la cara cosas como que nadie está obligado a trabajar en esta Empresa y que los Trabajadores que tienen que desplazarse para trabajar a otros países, ya están suficientemente recompensados.
Tampoco se quiere compensar a los trabajadores que viajan a países con baja calidad de vida, ni a los que sacrifican sus fines de semana para llegar a los hitos de los proyectos.
Por un lado nos dicen que somos unos trabajadores excepcionales, que tenemos un compromiso y una gran capacidad de trabajo, que desde Alemania estamos muy bien valorados, y por otro lado, no se nos puede recompensar porque las cuentas no salen.
En cambio, sí salen las cuentas para pagar sueldos astronómicos a los directivos, para coches de alta gama, y para pagar a empresas de “coaching” en un vano intento de hacernos ver que lo importante no es el dinero, sino un corporativismo que nos llevará a la felicidad.
Una distribución de los beneficios de la Compañía en donde los Trabajadores siempre salen perdiendo, no hay empresa de “coaching” que lo arregle, porque la satisfacción del empleado no se conquista intentando cambiar su manera de pensar.
Si nada lo desmiente en los próximos días, quedará corroborado que no estamos ante una negociación, sino ante una imposición.
“Si pagamos a la gente con cacahuetes contrataremos monos”
Rosa María García, 2 de febrero del 2017.
Os mantendremos informados.
Tres Cantos, 23 de febrero de 2017
